
Antiguo nombre y apellido catalán, derivado del nombre personal latino Gregorius, adaptación del nombre griego ghregorios, de eghregorein, “estar atento, despierto”. En parte tiene este apellido origen patronímico (es decir, nombre convertido en apellido), y, en parte, origen toponímico, pues son varios los lugares llamados Sant Gregori existentes en tierras catalanas, de los cuales pudieron tomar el nombre individuos que eran originarios de los mismos. El apellido, poco frecuente, se registra sobre todo en la provincia de Valencia, siendo notable su presencia en las de Alicante, Barcelona y Castellón.