
Apellido, en general, de origen aragonés, procedente del sustantivo –escolano-, nombre que en la Edad Media venía a ser sinónimo de “monaguillo” o “sacristán”, pero que después, particularmente en el reino de Aragón, fue el nombre que recibía el niño educado para el culto y el canto en monasterios y catedrales. Es apellido poco frecuente y registrado sobre todo en las provincias de Alicante, Zaragoza, Valencia y Barcelona. Tuvieron los Escolano solar infanzón en las Montañas de Jaca (Huesca), extendiéndose sus ramas a Longares (Zaragoza) y a Arcos de Jalón (Soria).