
Apellido de origen occitano (también escrito Albiac), poco frecuente y presente, sobre todo, en la provincia de Valencia. Asientos notables se registran en Barcelona y Castellón, y menores en Cádiz, Alicante, Madrid, Las Palmas, Tarragona, Málaga, etc. Procede del topónimo Albiac, nombre de una población del Departamento francés de l´Ariège, cuyo étimo, según Dauzat, es el nombre personal celto-romano Albiacus, derivado del latín Albius, más el sufijo céltico –acus, con el significado de “blanco”, pero también “colonia fortificada”, “castillo”.